viernes, 16 de diciembre de 2011

Sabor a porro

                          Fotografía y efecto: Víctor González Solano

Sabor a porro

A Pablo Flórez

En Ciénaga de Oro
la vida sabe a porro,
 las mujeres huelen a fandango
y la aurora es anunciada por un palitiao.
Por sus calles polvorientas,
por donde caminó y bailó
María Varilla,
caminó lento, pero muy seguro,
el viejo Pablo.
Abarcas tres puntá,  sombrero sabanero,
pantalón caqui,  camisa blanca
y nudo en el pañuelo apretado de plata.
Pablo, hechicero del pentagrama,
amante empedernido de las vitrolas
el que siempre esperó a la aventurera,
esa que no sabía que él todavía la quería.
Pablo, gallo fino de espuela recta,
toro bravo de corraleja,
el que le puso sabor al porro
y curó las heridas de la cumbia.
Víctor González Solano

2 comentarios:

  1. stanly montero morales18 de diciembre de 2011, 7:03

    en mi criterio el maestro pablo ha sido el más grande cantautor costumbrista que ha brotado la madre tierra en el caribe colombino, que profunda tristeza para los que nos toca despedirlo pero que gran alegria para quienes lo reciben...etelvina, encarna, estefania,la yaya, eloa, batata, jose y juan lara, jesus saya, major no sigo porque me dan ganas de arrancar a mi tambien. maestro vaya tranquilo que usted cumplio su mision, gracias por ese gran legado que nos deja ( LA MUERTE ESTÁ TAN SEGURA DE SU VICTORIA QUE DA TODA UNA VIDA DE VENTAJA)

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  2. En Ciénaga de Oro olerá a porro, fandango, cumbia por siempre! Pablo Florez junto con Antolin Lenes, Lucy Gonzalez, y otros grandes del folclor cordobés, marco la diferencia entre cantar por ganar fama y cantar por alegrar el alma. El maestro se fue, pero dejo todas las costumbres e historias de un pueblo, que el Nobel de Literatura, Gabo, hablaría sobre el en uno de sus libros "una tierra de aluvion donde las gallinas tienen lleno el buche de pepitas de oro" Paz en tu tumba Pablo Jose!

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